Muerte de Alberto Fujimori marca el fin de una era política en el Perú: ¿Se acabará el odio?
Amado por miles y odiado también por miles, Alberto Kenya Fujimori Fujimori
dejó de existir la tarde de este miércoles víctima de cáncer a los 86 años. Su
deceso se dio de manera inesperada, a vísperas de cumplirse 32 años de la
captura del genocida más grande de la historia del Perú, Abimael Guzmán Reinoso,
y como ironía del destino, exactamente tres años después de la muerte de
este.
Fuentes cercanas al exmandatario señalaron que el último martes comenzó a
sentir dolores, por lo que el personal médico que lo atendía de manera
permanente le tuvo que administrar sedantes para poder paliar el cuadro que
padecía, lo cual permitió que duerma tranquilamente, sin imaginar que ya no
volvería a despertar. Al día siguiente, llamó la atención de los familiares el
hecho de que los signos vitales del exmandatario comiencen a debilitarse. De
inmediato se dio aviso a las personas más cercanas, quienes fueron desfilando
uno a uno por la casa de su hija Keiko, en el distrito de San Borja, donde el
expresidente permanecía desde que dejó el penal del fundo Barbadillo en
diciembre de 2023.
Fujimori, quien deja un legado político controvertido que marcó profundamente
la historia política, económica y social del país; batalló durante varios años
contra un cáncer de lengua, así como al total rechazo de sus opositores, en su
mayoría izquierdistas, quienes deseaban que hasta el final de sus días
permanezca encarcelado, sin embargo, finalmente fue beneficiado por un indulto,
que tuvo que ser ratificado en el Tribunal Constitucional, para que se haga
efectivo de manera definitiva.
Al registrase su deceso, su abogado, Elio Riera, fue quien dio a conocer el
fatal desenlace a través de su cuenta de X:
“Señor Presidente, gracias por todo. Descanse en Paz. Su legado perdurará en
la historia. Su amistad para mí será eterna. Recordaré siempre sus palabras:
logramos el objetivo. Hasta pronto, mi gran amigo”, escribió.
Minutos después, la excandidata presidencial Keiko Fujimori pidió a sus
seguidores orar por el descanso eterno de su padre.
“Después de una larga batalla contra el cáncer, nuestro padre, Alberto
Fujimori, acaba de partir al encuentro del Señor. Pedimos a quienes lo
apreciaron nos acompañen con una oración por el eterno descanso de su alma.
Gracias por tanto, papá”, expresó la lideresa de Fuerza Popular (FP).
Rechazo y admiración Cabe señalar que la figura del
exmandatario ha generado admiración y rechazo por igual, dividiendo al Perú
durante décadas, desde que comenzó su vida política. Mientras un sector de
los peruanos lo recuerda como el líder que salvó al país del colapso económico y
derrotó al MRTA y a Sendero Luminoso, otros lo consideran un dictador que violó
los derechos humanos y socavó la democracia.
Esto último, en referencia al autogolpe de 1992, cuando Fujimori cerró el
Congreso ante la negativa de este poder del Estado de otorgarle amplios poderes
para legislar sin fiscalización.
Fujimori, con sus luces y sombras, fue uno de los personajes más influyentes
del Perú contemporáneo, y su muerte pone fin a un capítulo cargado de tensiones,
logros y crímenes.