Israel vuelve a someter la ciudad de Jan Yunis y obliga a huir a 150.000 personas
Las tropas de ocupación israelíes chocan de nuevo con la
resistencia armada en la segunda ciudad de Gaza con un alto coste para las vidas
de los civiles
En estos casi diez meses de contienda, Israel apenas ha conseguido cerrar
ninguna de las batallas clave que ha abierto a lo largo de Gaza. El proceso
suele ser siempre el mismo. El ejército asedia, expulsa a los ciudadanos,
golpea, se retira y, semanas o meses después, regresa porque comprueba que su
objetivo de desactivar la resistencia armada palestina no ha sido logrado. Una
espiral de violencia y muerte, por el momento, sin fin.
Jan Yunis, en el sur del enclave, se ha convertido de nuevo esta semana en el
principal escenario de la guerra. Desde el lunes, unas 150.000 personas, según
la ONG Consejo Noruego para Refugiados (NRC, por sus siglas en inglés), han sido
de nuevo desplazadas desde la zona este, la más próxima a la valla de separación
con Israel, hacia la gran acampada humanitaria de Al Mawasi, en la costa
mediterránea, y otras áreas de la ciudad. Se trata de movimientos de población
llevados a cabo de manera forzosa por los militares israelíes, que han
intensificado en Jan Yunis sus ataques contra Hamás, cuyos batallones siguen
haciendo frente a esas tropas de ocupación.
Desde el lunes, los muertos en la segunda ciudad de la Franja ascienden a
121, la mayoría mujeres y niños, según han detallado los servicios de emergencia
locales en un comunicado. Añaden que hay decenas de cuerpos atrapados en la zona
de Beni Suheila, en el este de la ciudad. El total de muertos en Gaza desde el
comienzo de la guerra, el 7 de octubre, ascienden a 39.145, según datos de las
autoridades sanitarias del gobierno de Hamás hechos públicos este miércoles.
“Está siendo un mes de julio terrible en el sur de Gaza”, advirtió este lunes
un comunicado de Médicos sin Fronteras (MSF). “Los incesantes bombardeos y
ataques aéreos de las fuerzas israelíes se cobran la vida de cientos de personas
en la Franja. Solo en los últimos 10 días, los equipos de MSF han respondido a
cuatro incidentes con víctimas masivas”, prosigue el texto.
El último de esos ataques tuvo lugar el lunes en Jan Yunis, donde solo un
hospital sigue funcionando a duras penas: el Al Nasser, adonde ese día llegaron
más de un centenar de heridos, según datos del Ministerio de Sanidad de la
Franja gobernada por Hamás citados por la organización médica.
Mientras decenas de muertos, heridos y mutilados llegan a ese hospital, donde
los heridos tienen que compartir la cama, según MSF, o ser tratados en el suelo
cubierto de sangre, las escenas de miles de personas escapando con lo puesto se
suceden mientras, de fondo, se escuchan disparos, según las imágenes captadas
por reporteros locales. Algunos lloran desesperados, otros se detienen agotados.
Hay niños de ocho o diez años que tiran de sus hermanos pequeños malamente
acomodados en carritos. Se ven sillas de ruedas atascadas por la senda de
piedras y arena con edificios destruidos en los alrededores. También mujeres
mayores sollozando en medio de la polvareda.
La gran mayoría de los 2,3 millones de gazatíes han sido empujados a lo largo
de la presente contienda fuera de sus casas. Muchos de ellos, varias veces.
Estas escenas han sido frecuentes en Jan Yunis, que llegó a estar hasta cuatro
meses seguidos asediada por las tropas de Israel.
Militares de la División 98 del ejército de Israel aseguran haber localizado
un túnel en esa ciudad y eliminado a varios “terroristas” mientras en la zona de
Beni Suheila interceptaron un vehículo con miembros de la resistencia armada,
según han señalado este miércoles portavoces militares en la red social X (antes
Twitter). “En una operación combinada aérea y terrestre, un avión y un tanque
atacaron el vehículo y eliminaron a los terroristas que se encontraban en su
interior”, han añadido. Las operaciones también se han desarrollado en las
últimas horas en la meridional Rafah y en otros puntos de Gaza
A comienzos de semana, el ejército había anunciado un nuevo desplazamiento
masivo de vecinos, algo que el derecho internacional humanitario considera
ilegal. Lanzaron, como en anteriores ocasiones, octavillas desde el cielo y
replicaron el mensaje en sus redes sociales. Dos días después, hay “personas que
están atrapadas sin comida ni agua en Jan Yunis a los que nadie puede llegar y a
los que nadie puede evacuar”, señala Hind Khoudari, reportera de la cadena
catarí Al Jazeera, “se trata de personas que no tuvieron tiempo de irse”. El
único hospital que se mantiene en funcionamiento es el Al Nasser, confirma, y
“los bombardeos y los ataques aéreos continúan” mientras los ciudadanos
“intentan trasladarse a una zona más segura”.
Las organizaciones humanitarias “han denunciado la obstrucción sistemática de
la ayuda por parte de Israel y sus continuos ataques contra las operaciones de
ayuda, incluidas las instalaciones, el personal y los puntos de distribución, lo
que ha impedido la entrega efectiva a las personas necesitadas”, afirma el
Consejo Noruego de Refugiados en un comunicado, que lamenta no haber recibido
“ninguna ayuda” en su almacén desde el 3 de mayo.
En un bombardeo llevado a cabo el 13 de julio, Israel mató al menos a 90
personas en la zona humanitaria de Al Mawasi, en Jan Yunis. El objetivo, según
las autoridades del Estado judío, era Mohamed Deif, de 58 años, jefe militar de
Hamás en Gaza, cuya muerte no ha sido confirmada por ninguno de los dos lados.
La semana pasada, el ejército afirmó haber destruido la mitad de la cúpula del
principal grupo palestino armado.
“Ira” de Netanayahu El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, se
encuentra desde el lunes de viaje oficial en Estados Unidos. “Le estamos dando
todas las herramientas para lograr un acuerdo que permita la liberación de
decenas de rehenes. Después de eso, sabremos cómo volver a la guerra”, ha
señalado el ministro de Defensa, Yoav Gallant, durante una visita a Rafah,
extremo meridional de Gaza, el martes.
En Estados Unidos se encuentra también Ronen Neutra, padre del soldado Omer
Neutra, cautivo en Gaza, que ha criticado cómo Netanyahu ha abordado los
secuestros. “Hemos visto a estadounidenses que nos escuchan. Esa no es la misma
sensación que hemos tenido del primer ministro”, ha dicho Neutra este miércoles
a la radio pública Kan. También ha criticado que Netanyahu haya mostrado “un
poco de ira por algunas de las cosas que habíamos dicho”. “Estamos en un momento
en el que los estadounidenses dicen que Hamás está listo y que es cuestión de
días en los que se pueda llegar a un acuerdo, si hay un liderazgo dispuesto a
ello por parte de Israel”, ha remarcado.
El movimiento fundamentalista lanzó un ataque inédito, el peor de este tipo
recibido por Israel en toda su historia, que causó unas 1.200 muertes en
territorio israelí el 7 de octubre. Ese fue el detonante de la contienda, que
mantiene a las partes negociando un posible alto el fuego en el que se
liberarían también los, en torno, a 120 rehenes, decenas de ellos confirmados ya
muertos, de los 250 que los islamistas palestinos capturaron. Estos días, los
encuentros se mantienen en Egipto y en Qatar para conseguir esa tregua, que
también sobrevuela las reuniones de Netanyahu en Estados Unidos.